Agustín Salvatierra: “Hay gente que necesita ayuda, pero sobre todo necesitan herramientas”

El actual director técnico de las series menores del Cacique acompañó al grupo de amigos del “Chato Subiabre” a entregar colaciones a personas en situación calle.


Días difíciles han tenido que soportar las personas en situación calle debido al avance del Covid-19 en Chile, las medidas de confinamiento han imposibilitado a diferentes organizaciones de poder acompañar y entregar ayuda a quienes desde la calle intentan sobrevivir no solo a la pandemia, sino que también al hambre, al frío y sobre todo a la falta de oportunidades.

En ese contexto, un grupo de socias y socios del CSD Colo-Colo nombrados como “La Banda del Chato Subiabre” y en conjunto con el Área Social de nuestro club, se organizaron para realizar la tradicional Ruta Norte en la Región Metropolitana y pudieron entregar 120 porciones de porotos acompañados por un pan y una manzana por persona.

Agustín Salvatierra, jugador del Cacique entre 1987 y 1995, acompañó la salida y comentó que “esto demuestra la unidad del colocolino y del compromiso que tiene la gente y todo lo que involucra lo que es Colo-Colo. Nosotros somos unos eternos agradecidos con la gente y por eso no me podía restar porque soy un afortunado, soy un agradecido, primero de pertenecer a un club tan grande, segundo que mis raíces en Colo-Colo siempre fueron de esfuerzo, de perseverancia y de poder ayudar a la gente que más lo necesita”.

El ‘Cucho’ apuntó que debe haber medidas de inclusión que permitan la reinserción a la sociedad de estas personas y enfatizó en que “hay gente que necesita ayuda, pero sobre todo necesitan herramientas. Hay muchos recicladores que necesitan herramientas porque por si solos no podrán salir adelante. Ellos necesitan que los eduquen, que puedan unirse en grupos para poder salir de esta situación y replicar lo que han hecho otros campamentos, se les ha educado, se les ha entregado herramientas, se les ha instruido en algún oficio, esa es la única forma. Las autoridades más que salir a hablar o mostrarse para conseguir votos, tienen que prevenir con mucha anticipación. Esto de la calle no se acabará hasta que no eduquemos y logremos rectificar ese vacío que tiene la sociedad con toda la gente de la calle”.

“Después de todo lo que sucede en esta experiencia, uno se queda con su corazón y su alma con la reflexión del agradecimiento por tener vida, de estar sano, de tener la posibilidad de ayudar, de tener una familia que pese a todo te respalda y te ayuda y te da fuerzas para poder seguir colaborando con la vida. Poder ayudar es un estilo de vida porque no solamente somos personas públicas que no hacen nada por el prójimo. En los valores que uno tiene, siempre está poder ayudar al prójimo, ser empáticos y ser solidario, sobre todo hoy. Si no estamos unidos esto no lo sacamos adelante”, cerró.

CSD CC