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“No fue fácil”, recuerdan desde el plantel del Cacique quienes con mucho trabajo consiguieron consagrarse como las campeonas de América el 2012 en la ciudad de Recife. Un torneo muy aguerrido en cada partido que disputaron y que en la final se definió desde los lanzamientos penales.

Nathaly Quezada, delantera de Colo-Colo femenino, recuerda que “queríamos ganar el partido, pero las chicas brasileñas se metían atrás. Su entrenador pedía el tiempo y nosotras no queríamos irnos a los penales”.

Pero antes de la final, las albas tuvieron que sobrepasar el Grupo C dónde terminaron en el segundo lugar con 7 puntos, detrás de Vitória de Brasil, con la misma cantidad de unidades que el Cacique, pero con mejor diferencia de gol. Más atrás quedó Universidad Autónoma de Asunción con 3 puntos y en el cuarto puesto se instaló JC Sports Girls de Perú que no marcó diferencias.

El Cacique logró clasificar a la segunda ronda puesto que tenía mejor diferencia de gol que Boca Juniors y Deportivo Quito. Así, tuvo que enfrentar en la semifinal a Vitória de Brasil, donde ganó por 4-3.

“Los sueños dejan de ser sueños cuando se cumplen”

Con confianza y convicción, así llegaban las dirigidas de José Letelier a disputar la final de la Copa Libertadores frente a Foz Cataratas. Y es que la campaña que habían hecho las albas, les daba esa tranquilidad. Invictas, con tres partidos ganados y uno empatado, las jugadoras sabían que era muy difícil que algún equipo las derribara.  

Sin embargo, en el trabajo precompetitivo del Cacique, el Preparador Físico, Felipe Ortiz, ponía los pies en la tierra. “Con lo que hemos hacho hasta acá, nos ha alcanzado, pero eso, no basta para este último partido, tenemos que meterle el doble, hoy tenemos que ponerle doble. Hoy tenemos que entregar lo que no tenemos, por qué, porque con eso, vamos a sacar esto adelante. Los sueños dejan de ser sueños cuando se cumplen y hoy cumplimos este sueño de ser campeones de la Copa Libertadores”, arengó.

El trámite del partido fue complicado, las jugadoras brasileñas cerraron los espacios y complicaron los ataques de Colo-Colo que en 90 minutos no pudo romper el empate.

Desde los 12 pasos, las jugadoras del Cacique fueron las grandes figuras tras imponerse con categoría por 4-2. El primer penal para Colo-Colo lo marcó Rocío Soto, luego fue el turno de Francisca Lara. Extendió las cifras Karen Araya y cerró el cuarto lanzamiento Gloria Villamayor. Tras eso, la portera Christiane Endler, atajó el quinto penal brasileño lo que le dio la victoria a las albas que festejaron merecidamente el hito más importante del fútbol chileno a nivel femenino.

Carla Guerrero, defensora del Cacique en el campeonato, comentó a Pasión del Pueblo que obtener la Copa Libertadores con Colo-Colo, significó mucho en su carrera.

“Creo que conseguimos algo súper importante para el club, personalmente fue algo muy importante para mí, para mi carrera como jugadora, nos permitió explotar un poco más el fútbol femenino. Han pasado siete años y no me he podido olvidar”, dijo.

La ‘Jefa’, como es conocida la defensora, agregó que “siempre recuerdo esta fecha porque además está de cumpleaños mi sobrina Mariana, y antes de irme a la cancha, había hablado con ella y con mi hermano por videollamada, le decía que cuando soplara las velas, que uno de sus deseos fuera que ganáramos la Copa Libertadores con Colo-Colo (ríe)”.

Por su parte, Nathaly Quezada, recuerda que “teníamos mucha ansiedad de jugar ese partido, había mucho nervio. Queríamos saber del rival, pero lo que más queríamos era conseguir un gran resultado. Fue muy físico, hubo mucho compañerismo, si una la jodía, estaba la otra más atrás para solucionarlo. Ganar la copa, ha sido lo más lindo que he vivido en mi etapa como futbolista”.

Los zapatos que se quedaron en el hotel

A pesar del resultado y las convicciones del plantel de José Letelier. Antes de la final hubo un hecho anecdótico muy particular para una de las autoras de los goles en la tanda de penales.

“El bus iba rumbo al estadio cuando mis zapatos enmudecía el transporte de Colo-Colo”. Era la voz de Gloria Villamayor que gritó fuerte tras acordarse de que no llevaba los zapatos de fútbol. El bus tuvo que volver al hotel para que la jugadora pudiera disputar la final.

La delantera del Cacique, entró rápidamente hasta su pieza y cuando iba de vuelta a reencontrarse con sus compañeras, el hotel quedó en penumbras, ya que se cortó la luz. “Salió con susto”, recuerda Carla Guerrero que además, dice que “fue una de las tantas anécdotas que vivimos en la Copa”.

Finalmente, las jugadoras llegaron al estadio cantando canciones de la hinchada popular y ‘Loly’, como le dicen a Gloria Villamayor, terminaría anotando el cuarto gol de Colo-Colo con los mismos zapatos que había olvidado en un lugar de su habitación.

La noche inolvidable:

Colo-Colo se vistió de gala para recibir el trofeo más importante del fútbol sudamericano y la emoción inundó el camarín popular. José Letelier, tras el partido se mostró muy emocionado y sostenía estar muy contento. “Es un torneo muy difícil de jugar, se notó el cansancio de los dos equipos durante todo el campeonato y cuando uno tiene una convicción, al final resulta”, decía.

Estefanía Banini, por su parte, agradeció poder estar en Colo-Colo y sobre todo a sus compañeras, que, sin ellas, nada era posible. “Estoy muy agradecida del cuerpo técnico que confió en nosotras desde el primer minuto, la verdad es que esto es gracias al equipo que somos, hace dos años que entrenábamos para esto y estamos cumpliendo un sueño”.

Posterior a la final del 2012, el Cacique consiguió llegar a la final el 2015 y el 2017, mientras que en los años 2013 y 2018, consiguió el tercer y cuarto lugar, respectivamente.